Siempre me he considerado una docente de vocación, desde niña quería ser maestra, aún no sé, si este deseo nació en mí, cuando todavía no tenía una lógica tan desarrollada de pensamiento, al ver que mis padres desarrollaban su labor cotidiana, sí, efectivamente, crecí en el seno de una familia de padres docentes, maestros rurales en un principio, de quienes tal vez absorbí el amor por una profesión. que sin duda ha marcado mi vida, dándole un inmenso sentido.
Convertirme en maestra, no fue un trayecto lineal en mi vida, porque siendo mis padres maestros y habiendo experimentado lo que implica vivir y enseñar en lugares tan apartados de la civilización, no querían para su hija una situación similar, así que pudiendo haberme inscrito en la escuela normal al egresar de la secundaria, mis padres eligieron el bachillerato para mí, estudios que desarrollé en una escuela preparatoria de reciente creación, en la que tuve como docentes a muchos jóvenes profesionistas, con gran vocación y calidad humana, que fortalecieron mi preferencia profesional con su ejemplo. De la preparatoria pasé a la universidad a estudiar una carrera, la que sin duda, si en ese tiempo se hubiese utilizado el léxico actual de los jóvenes diría que fue una carrera x, porque para mí, daba igual estudiar esa u otra. Creo mucho en el destino y en la posibilidad de decisión que las personas tenemos para alterarlo o modificarlo, ahora, mucho tiempo después, puedo decir que, así como la neurolingüística indica, convertirme en química bióloga bromatóloga, fue la mejor decisión dada las condiciones que tenía. Mientras cursaba el quinto semestre de la carrera, ingresé a una preparatoria nocturna de trabajadores a enseñar química. Al egresar de la carrera entré al ámbito laboral, propio de la carrera estudiada, experiencia que sirvió para confirmarme que la vía para mi realización profesional no era esa, tenía ya la certeza que me dedicaría a la docencia, independientemente de las condiciones laborales que se me presentaran y lo difícil que pudiera ser, con esta convicción se presentó la oportunidad de concursar por oposición para obtener una plaza en la Universidad Pedagógica de Mérida, en un concurso abierto, con ilusión viajé a la ciudad de Villahermosa Tabasco, para participar en esta convocatoria, en la que tenía únicamente, mi vocación y la corta experiencia de tres años de docencia para participar. Grande fue mi sorpresa, al conocer los resultados y saber que había sido seleccionada. A los dos años de esta oportunidad, se me presentó otra. la de contraer nupcias y cambiar de residencia a la ciudad de Cancún, evidentemente, la edad que tenía para cumplir otra de mis aspiraciones, no me dejaba gran posibilidad para tomar otra decisión, así llegué a Cancún en 1990, año en el que para los profesionistas aún era tierra de las oportunidades, trabajé en varios colegios particulares, para después buscar una situación laboral más estable, por lo que solicité ingresar al CBTis 111, dos años después de cubrir múltiples licencias, me dieron un contrato definitivo. El mismo año concursé en la Universidad Pedagógica Módulo Cancún, por una plaza de diez horas, veredicto que fue favorable. Desde que ingresé al CBTis 111 formalmente, he ocupado cargos, de diversos niveles de responsabilidad, que van desde jefaturas de oficina, departamento, subdirección y actualmente la dirección, la que obtuve por concurso en 2007. Un gran compromiso con el que considero enmarco esa trayectoria, que desde niña soñé.
Desde mi perspectiva, alguien que ha sido maestro no deja de serlo nunca, y sé, que gustosamente regresaré a dar clases, el día que esta encomienda termine.
Describir un día en mi práctica docente, es poder salir del contexto para visualizar lo que acontece en mi práctica en forma intencionada. La relación que tengo con mis alumnos procuro que sea armónica, que exista confianza y que la clase se desarrolle en un ambiente relajado, esto no quiere decir que los alumnos hagan lo que quieran, sino que se sientan respetados y con la seguridad de poderse expresar, me gusta que entre ellos interactúen, a pesar que a veces es difícil, porque se relacionan de una manera que consideraría fuerte, casi siempre intervengo para moderar la relación y comunicación entre ellos ya que considero, que como docente mi objetivo es formar a los alumnos y no sólo enseñarles contenidos académicos. En el salón hago todo lo posible por estar siempre de buen humor, sonreír a los estudiantes y ser firme cuando hay necesidad de corregir. Esta estrategia me ha resultado, a pesar de tener muchos alumnos en un grupo, provenientes de diversos contextos socioeconómicos, son contadas las ocasiones en que me he sentido ofendida, por un comentario o alguna de sus acciones .
En cuanto al desarrollo de los contenidos, soy lógica, voy de lo simple a lo complejo independientemente de las asignaturas que tenga dentro de mi carga horaria, porque imparto tanto asignaturas del área de humanidades como las asignaturas del área químico-biológicas, participo y elaboro planes de clase y secuencias con mis compañeros docentes en academias, aunque no sigo estos guiones en forma estricta, porque también improviso, intento cubrir todos los contenidos acordados, lo que a veces es difícil porque el tiempo no siempre alcanza, cuando tengo que decidir que temas son prioritarios me inclino por los que serán antecedentes de contenidos posteriores o que se requerirán para favorecer alguna habilidad o actitud. En el desarrollo de las actividades los alumnos deben tener participación y a pesar que se me dificulta aprender sus nombres, procuro que sientan un trato personalizado de mi parte y visualizarlos e interactuar con el mayor número de alumnos en una clase. Cuando el contenido así lo exige, explico tanto frente al pizarrón como en diversos ángulos del salón, me gusta poner en práctica actividades innovadoras, como jugar serpientes y escaleras, loterías, trivias, ruleta, etc. Estos materiales los elaboro y a veces se los pido a los alumnos indicándoles cómo hacerlos.
No tengo un libro de texto, consultamos varios y aunque no dicto sí resalto los puntos más importantes en el pizarrón o en carteles, de modo que los alumnos tengan la oportunidad de hacer sus apuntes.
La evaluación no la realizo todos los días, pero en la actividad de cierre, siempre tomo en cuenta los puntos o acciones que considero importantes repasar y que los alumnos tienen que practicar, independientemente de la asignatura, los alumnos hacen una carpeta de evidencias, en la que nunca faltan reportes individuales de lectura crítica, éstas tienen que entregarlas por parcial y aunque las reviso únicamente en forma somera, me doy cuenta, quienes ponen interés y dan su mejor esfuerzo en la realización de sus actividades, Aplico exámenes con reactivos abiertos, como manera de cerciorarme quien aprendió y en qué grado y de la reforma a la fecha, les incluyo tablas, formularios o cualquier anotación que se requiera. Para aportar la calificación de parcial se considera su examen y sus trabajos que dependiendo de las condiciones tienen diferentes porcentajes. No tomo asistencia todos los días y me complace saber que los alumnos asisten en forma regular a las clases, siempre he pensado que los alumnos van de lo heterónomo a lo autónomo,. Es decir primero les tienes que exigir, poner límites, indicar lo que deben hacer, para luego poderlos soltar y que la relación con los jóvenes debe ser horizontal y homogénea y también que los adultos educamos con dos manos una de ellas es la de exigencia, de jalar los lazos o cuerdas y otra es la de la caricia y el afecto.
Sandra Lizama Quijano
24 mayo 2009
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Buenas tarde Sandra
ResponderEliminarSoy iliana Herrera me es grato compartir con tigo las experiencias de los estudiantes en el uso del internet, en mi caso son pocos los alumnos que son creadores de blog páginas web, etc pero aligual que tu creo equipos con esos alumnos para ser la clase más interactiva, promoviendo el interes por crear.
Yo soy maestra por casualidad y por una oportunidad al llegar a Cancún fue el primer trabajo, pero ahora me hatraido muchas satisfacciones, soy Cirujano Dentista la cual actualmente esta en segundo plano sin descuidarla ese es mi trabajo por las tardes, ya que en la mañana soy docente de Conalep. plantel 1.
Coicido con tigo en que a los adolescentes hay que marcarles limites para modificar su conducta y descubrir sus capacidades a través del máximo esfuerzo.
Hola maestra sandra,es usted una persona respetable y admirable a la vez,pues no muchas personas se atreven a luchar para conseguir sus metas.Me gusta mucho su clase, las dinamicas con las que trabaja hacen que no sea aburrida como en otras materias impartidas por otros maestros.La verdad, usted es un ejemplo a seguir para muchas pesonas adultas y jovenes.
ResponderEliminarSin parecer barbero, para mi usted es la mejor maestra del CBTIS 111.
jessica torres
ResponderEliminarmaestra de verdad es
admirable
le deceo la mejor
de las buenas vibras
bay
hola maestra sandra usted es una maestra buena onda y me gusta como nos enseña su clase.Usted es una persona admirable que siempre logra sus objetivos, es una persona que siempre nos a apoyado al igual que la maestra teresa. le deseo lo mejor y muchas gracias por aver trabajado con nosotros maestra
ResponderEliminarla queremos mucho
bye cuidese
atte matilde loria cupul